Mesa 24. La era de la información. Sociología de las tecnologías digitales e Internet

Pensar Ágora como un dispositivo para la ciencia participativa desde el sur global

  • Torres, Diego (LIFIA, CICPBA-Facultad de Informática, UNLP y Depto de CyT, UNQ)
  • Katzer, Leticia (GIIPEC/ICES/UnCuyo-CONICET)
Resumen

La ciencia participativa es una práctica de la ciencia abierta en que personas vinculadas y no vinculadas a instituciones científicas colaboran para llevar a cabo un proyecto científico en forma conjunta. La ciencia participativa, también conocida como ciencia ciudadana, posee diferentes niveles de participación de personas no profesionales de la ciencia. Dependiendo del vínculo y de la toma de decisiones los proyectos pueden clasificarse en proyectos de contributivos, de colaboración, de cooperación o co-creados. En los primeros los participantes no académicos son relegados solamente a tareas de recolección y las desiciones de diseño los toman los miembros académicos, mientras que en los últimos, todos los procesos y tomas de decisiones del proyecto se definen en conjunto por todos los perfiles de participantes. Los proyectos co-creados son los que dan forma a un proyecto realmente participativo.

Ágora es una plataforma que permite la co-creación de proyectos colectivos con especial foco en aquellos que utilizan un Smart Phone como herramienta de recolección, sin necesidad de tener habilidades de programacion. Cualquier colectivo puede co-crear sus proyectos e inmediatamente usarlos. Dado que la tecnología no es neutral, el propósito principal del proyecto Ágora es brindar una herramienta que permita a una comunidad de personas articular sus proyectos de ciencia ciudadana de recolección de una forma sencilla y sin necesidad de desarrollos costosos de aplicaciones personalizadas.

“Ciencia ciudadana” es una forma de ciencia abierta, es decir, abierta a la agentividad, los saberes y los dispositivos narrativos propios de una ciudadanía que por esencia es diversa culturalmente. Teniendo en cuenta esto, la etnografía situada representa un aporte fundamental a esta forma de práctica científica. En la etnografía colaborativa confluyen tres órbitas principales: participación comunitaria, colaboración y vinculación. Entre los principios epistemológicos centrales de las etnografías colaborativas se encuentran, entre otras,: a) el reconocimiento de la agentividad epistémica y política de quienes participamos en la práctica etnográfica; b) el co-diseño, la co-teorización y la escritura compartida como principio de investigación; c) entender la etnografía como definición de una preocupación pública común y un plan de acción colectiva sobre la base de una planificación comunitaria y gestión asociada; d) propiciar los instrumentos técnicos que hagan viable la concreción de co-teorizaciones. La propuesta metodológica incluye: a) promover el intercambio de ideas y debate en el espacio etnográfico de trabajo definiendo un plan de acción conjunto acorde al diseño del proyecto de investigación; b) hacer acompañamiento en los territorios junto a los diversos sujetos sociales implicados, para que la comprensión se transforme en compromiso activo; c) reflexionar sobre dificultades, acuerdos y desacuerdos con los sujetos sociales.

Este trabajo pensar formas particulares que pueden enriquecer a la ciencia participativa desde un análisis conjunto con la etnografía colaborativa situada. Así nos preguntamos: ¿Qué prácticas de la etnografía colaborativa pueden diversificar y enriquecer las formas de transferirse a la ciencia participativa? ¿Qué características especificas del sur global proponen una impronta particular a la construcción científica participativa? ¿Cuántas de estas características pueden ser incorporadas y de qué forma en un dispositivo digital como Ágora?